Queridos lectores: no me he ido.
Mi ausencia de estos ¡meses! tiene buenas justificaciones. La primera son las vacaciones. Después de unos cuantos veranos sin descansar/desconectar de veras, este lo he conseguido (aunque también he estado culebreando un poquitín entre tumbas y sarcófagos).
La segunda son los seis años que tiene mi ordenador. Murió y ha resucitado. En casa le llamamos Titus, pero estoy pensando seriamente en rebautizarle como Ave Fénix.
Y la tercera son las precedencias. La menda lerenda tiene que encontrar trabajo (remunerado) sí o sí y con carácter de urgencia. Así que prioridad uno: dejar la cola del paro.
Mi ausencia de estos ¡meses! tiene buenas justificaciones. La primera son las vacaciones. Después de unos cuantos veranos sin descansar/desconectar de veras, este lo he conseguido (aunque también he estado culebreando un poquitín entre tumbas y sarcófagos).
La segunda son los seis años que tiene mi ordenador. Murió y ha resucitado. En casa le llamamos Titus, pero estoy pensando seriamente en rebautizarle como Ave Fénix.
Y la tercera son las precedencias. La menda lerenda tiene que encontrar trabajo (remunerado) sí o sí y con carácter de urgencia. Así que prioridad uno: dejar la cola del paro.